Las leyes reguladoras sobre el consumo de tabaco y contra la conducción temeraria han mejorado la salud de los españoles porque han tenido un efecto inmediato sobre los hábitos no saludables y la mortalidad, según un informe que hizo público ayer el Observatorio Social de la Caixa.

El informe revela que entre los años 2000 y 2015 la carga de enfermedad derivada del tabaquismo y la conducción temeraria se redujo en un 37 %, en buena parte debido a la implementación de medidas legislativas, especialmente de aquellas más punitivas. Según el estudio, gracias en parte a las intervenciones legislativas realizadas sobre estas conductas de riesgo, en 2015 dejaron de perderse unos 1.400 años de vida en plena salud por cada 100.000 habitantes.

LA PROHIBICIÓN EN BARES/ En el caso del tabaquismo, la entrada en vigor de la ley de medidas sanitarias frente al tabaquismo (2005) explica el 6,81 % del descenso de ventas de tabaco.

Mientras, la modificación y endurecimiento de la norma con la restricción total del consumo en lugares públicos cerrados (que se realizó en el año 2010) explicaría el 16,55 % de esta reducción.

MULTAS Y CARNÉ POR PUNTOS / En materia de seguridad vial, el informe resalta que la reforma del Código Penal en relación a los delitos contra la seguridad vial (2007) explica un 13,34 % de la caída en la mortalidad por accidentes de tráfico en este mismo periodo.

Sin embargo, también señala que la introducción del carné por puntos (que se efectuó en el 2005) no tuvo efectos inmediatos hasta que se acompañó de una penalización real y efectiva de las infracciones.

LA INVESTIGACIÓN / El trabajo, titulado ¿Cómo legislar para promover la salud pública?, ha sido elaborado por el profesor de Economía Aplicada de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Jaime Pinilla.

La investigación ha tomado como objeto de estudio los dos comportamientos no saludables que más impacto tienen sobre la salud pública: el tabaquismo y la conducción temeraria, dos comportamientos, que, según Pinilla, provocan cargas de enfermedad prevenibles y, en consecuencia, costes económicos que podrían dedicarse a otras finalidades.

Según datos del Institute for Health Metrics Evaluation (IHME), en el año 2000 en España se perdieron 25.000 años de vida ajustados por discapacidad (AVAD) por cada 100.000 habitantes.

AVAD es una medida utilizada en economía de la salud, como indicador que refleja el tiempo y la calidad de vida relacionada con la salud: perder un AVAD equivale a perder un año de vida en plena salud.

Así, según el estudio, gracias en parte a las intervenciones legislativas realizadas, en 2015 dejaron de perderse unos 1.400 AVAD por cada 100.000 habitantes debido a estas conductas de riesgo.

SE RECAUDA MENOS / Por otra parte, el Estado ha recaudado un 3,16% menos por impuestos del tabaco entre enero y septiembre de este año en la comunidad autónoma de Extremadura, lo que la sitúa como la segunda región con mayor descenso en dicho indicador.

A su vez, a nivel nacional, la recaudación a través de impuestos especiales e IVA del mercado del tabaco, que incluye cigarrillos, cigarros, liar y pipa, ha descendido un 1,41% hasta septiembre, tras alcanzar unos ingresos de 6.793,36 millones de euros, en un entorno marcado por la caída de las ventas, según han informado a Europa Press en fuentes del sector.

Del total recaudado por las arcas públicas, 5.295,19 millones han correspondido directamente al Impuesto Especial sobre las Labores del Tabaco, un 1,39% menos, y los 1.498,17 millones restantes al IVA, lo que supone un retroceso del 1,5% respecto al mismo periodo anterior.