En diciembre del 2015, Isabel Allende (Perú, 1942) estaba con su familia en Brooklyn. Todos le preguntaban cuál sería el tema de su próxima novela. La escritora se preocupó. No tenia ni idea. El tiempo corría en su contra porque el 8 de enero era el día fijado para ponerse manos a la obra (todos sus libros los ha empezado a escribir un 8 de enero). En su cuaderno de notas había varios apuntes, pero la mecha se encendió cuando, por casualidad, vio una frase de Albert Camus: "En mitad del invierno aprendí, por fin, que hay en mí un verano invencible". A sus 75 años, Allende se sentía en mitad de un infierno personal. Se acababa de separar de su pareja tras 28 años de relación, un par de amigos íntimos habían fallecido, también su adorada perrita Olivia, a sus nietos los tenía lejos… Y empezó a escribir para salir de la agonía vital, como ha hecho muchas veces a lo largo de 35 años de carrera (su padre les abandonó, sufrió el exilio, vio morir a una hija, y de todo ello salió adelante escribiendo). 'Más allá del invierno'(Plaza & Janés) es el fruto de esas ganas de vivir. Una novela de ficción, poblada por inmigrantes en Nueva York, con grandes dosis de carga política. Contra Trump, evidentemente.

LA LEY DEL PÉNDULO

Allende reside en EEUU desde 1988 y cree que el país está viviendo un invierno político. "Trump es lo peor que le puede pasar a un país", sentencia la escritora en Madrid, horas antes de acudir a la Feria del Libro. El presidente es, a su juicio, la expresión de una inmensa fractura social. "Ahora la gente se atreve a hablar en voz alta y defender el racismo y la misoginia. Pero todo responde a una ley del péndulo y estoy convencida de que este panorama va a cambiar. Hace varias semanas, en Portland, un hombre blanco criticó en un autobús a una joven musulmana. Tres hombres salieron a defenderla y el agresor asesinó a dos de ellos a puñaladas. Es un acto horrible que sirve para explicar qué está pasando en EEUU, donde se junta lo peor y lo mejor del ser humano. Los tipos que tienen fe ciega en la supremacía blanca son los menos. La mayoría de la gente son como los tres que salieron a defender a la musulmana".

En noviembre del 2016, cuando Trump fue elegido presidente, Allende fue la primera en decir que se marcharía del país. No lo hizo. Pero un solo motivo: el amor. Justo cuando pensaba que a su edad no podría volver a encontrarlo (ha sufrido dos separaciones muy duras), un neoyorquino apareció en su vida y encendió una llama que ella ya pensaba apagada. "Me iba a ir, pero desgraciadamente me enamoré de otro americano", suelta sonriendo, antes de contar con detalle cómo le conoció (se trata de un admirador que se pasó meses mandándole mensajes y flores a diario).

"TRUMP NO SABE LEER"

Trump da miedo. Allende, que preside una fundación para ayudar a mujeres y niños inmigrantes, lo ve cada día. "Hay muchas personas que tienen pavor a las redadas en mitad de la noche. Por no hablar de lo que está ocurriendo en la frontera con México, donde los policías ahora pueden hacer lo que les dé la gana", apunta la autora, una de las escritoras más leídas del mundo en lengua española (ha vendido más de 65 millones de ejemplares de todas sus novelas y ha sido traducida a más de 35 idiomas). ¿Recomendaría su nuevo libro a Trump? No. Por una sencilla razón. "No sabe leer". Si supiera, añade, sabría que los inmigrantes y los refugiados no son un problema político sino una crisis humanitaria. Y sabría que la inmigración no se frena con "murallas chinas" sino ayudando a los países de origen. "Nadie quiere ser un exiliado, nadie sale de su país y lo deja todo por gusto sino para escapar de la guerra, el crimen o la miseria", insiste la autora de 'La casa de los espíritus', que huyó de Chile cuando el país cayó en la dictadura y vivió exiliada en Venezuela.

Allende está convencida de que si los tres personajes de 'Más allá del invierno' -una joven guatemalteca, un ensimismado profesor universitario y una chilena madura y optimista- han sabido sortear el temporal que azota sus vidas, también lo sabrá hacer el resto de personas que viven en EEUU. Porque el miedo no es algo que solo se dé en el gigante americano sino en el resto del mundo, castigado por el terrorismo y la vuelta a la extrema derecha. La escritora confía en que cada persona que lea 'Más allá del invierno' sienta raudales de empatía por su protagonista, Evelyn, una guatemalteca 'sin papeles'. Lo importante, dice, es "salir del invierno y abrazar con fuerza el irresistible verano que siempre nos ofrece la vida". Como ella, que a la edad en la que uno suele perder casi todo en la vida (salud, amigos, trabajo) vive con la ilusión de una adolescente su nueva relación de pareja. Y su nuevo libro, que empezará a escribir el 8 de enero.