Greenpeace recordó ayer a la Junta de Andalucía que ella es propietaria del terreno donde se sitúa el hotel de El Algarrobico, en Almería, "y que por ello puede y debe proceder a su derribo de forma inmediata". La ONG ha respondido así a la sentencia del TSJA que determina que es legal la licencia municipal de obras concedida a la promotora Azata para construir el citado hotel, en una playa de Carboneras, dentro del Parque Natural de Cabo de Gata. En una nota de prensa, la organización insta además a la Junta a que recurra la sentencia ante el Tribunal Supremo, ya que las organizaciones ecologistas no pueden hacerlo.

A juicio de la organización, la Junta debe ejercer su derecho de retracto sobre el terreno del hotel y salvaguardar la totalidad del sector urbanístico donde se asienta el citado hotel derribando la edificación. Además subraya la extrañeza que le provoca que esta sentencia haya sido emitida por la Sala Tercera y no por la Primera como el resto de casos relacionados.