El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha asegurado que los Presupuestos Generales del Estado del 2017 cuentan con una partida de 715 millones de euros para el corredor mediterráneo ferroviario para este año, que suponen una parte importante de los 817 millones que prevé destinar el Gobierno al tramo catalán durante esta legislatura. El coste total de la obra es de 17.000 millones de euros, de los que, según Fomento, se han abonado ya unos 9.500 millones.

"Ningún tramo del corredor se ralentizará por falta de fondos", ha garantizado el titular de Fomento, tras participar en la presentación del un estudio sobre las prioridades de la infraestructura realizado por el Gobierno de Cataluña y la sociedad catalana. Y aseguró que el corredor ferroviario es "una prioridad social, política y económica".

De la Serna indicó que los tramos del corredor mediterráneo que no tienen consignación presupuestaria es porque su desarrollo se encuentra en una fase muy anterior a la construcción, la de proyecto o la de expropiación de terrenos, que llevan a que su licitación o adjudicación ya tenga lugar en 2018.

"En todos los tramos que haya capacidad de licitar y contratar lo continuaremos haciendo con todos los recursos que sean necesarios", remarcó.

El ministro afirmó que no se parte de cero, dado que ya se ha hecho una inversión de 9.500 millones de euros del total de 17.000 millones que supone la ejecución del trazado del Corredor a lo largo del litoral.

Asimismo, subrayó las dificultades técnicas que han atravesado en el último año los trabajos de algunos tramos, que no se pudieron solventar por estar el Gobierno en funciones, pero indicó que el nombramiento del coordinador del Corredor, Juan Barrios, contribuirá a cumplir con todos los objetivos.

Las obras del tramo que enlaza Tarragona y Vandellós terminarán a finales del primer trimestre de 2018, afirmó. No obstante, reconoció que el de Vadellós-Castellón y el de Castellbisbal presentan distintas complicaciones técnicas que llevará a sacar de nuevo a concurso los contratos, si bien garantizó su ejecución en el horizonte de 2020 comprometido por Rajoy.

CALENDARIO "CLARO Y EVALUABLE"

El 'conseller' de Territori i Sostenibilitat, Josep Rull, y el de Empresa i Coneixement, Jordi Baiget, por su parte, han exigido al Ejecutivo español un calendario "claro, previsible y evaluable".

Ambos han coincidido en pedir al Gobierno de Mariano Rajoy "certezas" para que se consolide el conjunto del área del corredor mediterráneo, que genera más del 45% del PIB del Estado, y se pongan fin al "intenso divorcio", dilatado en el tiempo, entre palabras y hechos.

Los 'consellers' han admitido que el acto se podía plantear como "un memorial de agravios", pero no lo iban a hacer porque lo que querían era transmitir la reflexión de que el centralismo es "radicalmente ineficiente" para Cataluña, la Comunidad Valenciana, Murcia o Andalucía, pero también para el conjunto del Estado español y Europa.

Rull consideró que los Presupuestos de 2017 "tienen algún déficit cuantitativo y cualitativo preocupante". "El texto es importante, pero el contexto es fundamental", indicó. "Ha habido ya un divorcio demasiado intenso entre palabras y hechos", lamentó.