La Fiscalía ha mantenido su petición de dos años y un día de prisión para los 12 miembros del colectivo musical La Insurgencia, acusados de un delito de enaltecimiento del terrorismo, al entender que sus canciones suponen una "incitación indirecta" a cometer actos violentos.

Así lo ha expresado el Ministerio Público en sus conclusiones finales en la segunda sesión del juicio, que ha quedado visto para sentencia, en la Audiencia Nacional contra los doce raperos de este colectivo de hip-hop para quienes se pide además una multa de 10 euros al día durante 16 meses y la retirada de sus contenidos de internet.

En la sesión de este viernes, en la que han declarado tres agentes de la Policía Nacional, también se han escuchado versos puntuales de las canciones del colectivo.

La Fiscalía ha considerado que estas composiciones "propagan un método violento para combatir un sistema que (los acusados) consideran injusto" y que "enaltecen al grupo terrorista" PCE(r)-Grapo y a miembros del mismo que, ha dicho, "llevaron a cabo múltiples secuestros, atracos y asesinatos". En este sentido, comparando Grapo con Yihad, el fiscal ha señalado que "los acusados tienen una religión que es la lucha sindical obrera y que la explotación de los oprimidos merece una lucha armada contra determinados colectivos".

También ha precisado que la acusación contra los doce jóvenes no supone una vulneración contra la libertad de expresión, ya que esta tiene un "carácter limitable" en expresiones que alienten violencia, presente para el fiscal en las canciones de los acusados.

La defensa, por su parte, ha pedido la libre absolución al entender las pruebas contra ellos -sus canciones extraídas de Youtube- "irrelevantes" al basarse en una "interpretación sobre un contenido simbólico".

Alegatos finales

Ocho de los doce acusados han querido hacer uso de sus alegatos finales, en los que se han definido como "personas jóvenes que sienten injusticias e intentan protestar contra ellas" a través de la música y han defendido que "la expresión de emociones" sobre la sociedad "no puede ser delito".

Al terminar el juicio han sido recibidos por aplausos por un pequeño grupo de personas que esperaba a las salida de la Audiencia Nacional, donde han cantado "La batalla continuará contra su represión, somos un huracán".

La Insurgencia es un colectivo de raperos que se autodefine como un grupo "musical que pretende fomentar el internacionalismo, difundir y expandir la cultura revolucionaria, y elevar el nivel de conciencia de las masas trabajadoras".

En sus temas, más de 300 en su canal de Youtube -en el que cuentan con casi 650.000 visualizaciones y cerca de 3.500 suscriptores- entonan versos como "Quedan muchos presos políticos en comisaría, brindaré cuando logremos conseguir la amnistía" o "Revolución o nada, los fachas están de jaja gracias a la izquierda domesticada".

El pasado 31 de octubre la Plataforma en Defensa de la Libertad de Expresión presentó un escrito frente a la Fiscalía pidiendo la retirada de los cargos contra los acusados al considerar que las letras de sus canciones se encuentran "en el plano de la libertad de creación artística o intelectual, sin que esté justificada su persecución".