La ola de frío glacial que se abate sobre el centro y partes del sur de Europa, entre las que no está España, ha causado un mínimo de 18 muertos en Italia y Polonia en las últimas 48 horas y ha dejado imágenes de hielo y nieve en zonas tan poco habituales como las playas de la isla de Sicilia o el centro de Estambul. Trenes, aviones, carreteras y transportes marítimos también se han visto afectados por temperaturas como las de Moscú, que ha alcanzado su récord negativo de los últimos 120 años, con 30 grados centígrados negativos.

El origen de la ola se encuentra en una masa de aire polar procedente de Escandinavia. La previsión es que hoy empiece a remitir el frío en los territorios afectados. La mayor parte de las ocho víctimas de Italia eran sintecho con edades comprendidas entre los 46 y los 66 años que permanecían en el exterior, cuando las temperaturas habían descendido por debajo de los cero grados centígrados en los lugares donde fueron encontrados.

Los fallecimientos se han producido en Florencia, Milán y localidades del centro (Latina), suroeste (Messina) y sureste (Altamura) del país.

Dos de las víctimas eran de origen polaco, uno rumano y otro indio y el resto, italianos. En la zona de montaña próxima a la ciudad de Génova se han registrado 14,7 grados bajo cero y en la isla de Capri, la noche del viernes el termómetro también se situó bajo cero. Numerosos enlaces marítimos entre el territorio peninsular y las islas italianas han estado suspendidos varias horas, como los que comunican Capri con Nápoles y Sorrento o los ferris a las islas Eolias (Sicilia). En la región de Apulia (sureste) han cerrado durante unas horas los aeropuertos de Brindisi y Bari y hay carreteras cortadas en varias zonas, sobre todo en Sicilia y en Apulia.

POR DEBAJO DE -20º

Las 10 víctimas mortales de Polonia se deben a las temperaturas por debajo de los -20º que se han registrado en varias regiones. En Rusia, el termómetro ha caído hasta los -24°C en San Petersburgo, donde la policía ha hallado el cuerpo de un hombre muerto de hipotermia.

En Turquía una intensa ventisca de nieve ha paralizado el aeropuerto de Estambul, con cientos de vuelos cancelados. Cerca de 6.000 personas han tenido que ser alojadas en los hoteles de la ciudad a la espera de que amaine el temporal. El tráfico marítimo en el estrecho del Bósforo también ha sido interrumpido.

Grecia también padece temperaturas extremadamente bajas y acompañadas de fuertes nevadas en algunas zona. En Bulgaria, los cadáveres de dos inmigrantes ilegales iraquís fueron descubiertos congelados este viernes en un bosque del monte Strandzha (sureste), cerca de la frontera con Turquía. Un afgano de 20 años fue hallado muerto de frío el martes en el norte de Grecia, tras cruzar la frontera entre Grecia y Turquía.