La reina Sofía destacó ayer la labor de los familiares de enfermos de alzhéimer y el trabajo que se hace desde la Confederación Española de Alzhéimer (Ceafa) y expresó su aliento y ánimo a los pacientes y a sus familias.

Doña Sofía, que presidió la inauguración del 7º Congreso Nacional de Alzhéimer, que se celebra en Málaga, afirmó que los familiares necesitan de un alivio en el cuidado de los enfermos. Bajo el lema Sigo siendo yo han acudido más ochocientas personas, entre familiares, profesionales y algunos pacientes al congreso y han abordado los problemas que se encuentran como los retrasos en los diagnósticos y la falta de centros de día para ofrecer terapia.

Posteriormente, la reina Sofía, acompañada por la presidenta andaluza, Susana Díaz; el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; el secretario de Estado de Servicios Sociales, Mario Garcés; y la presidenta de la Ceafa, Cheles Cantabrana, entre otras autoridades, visitaron los expositores.

Susana Díaz agradeció el esfuerzo de la reina Sofía por dar visibilidad a una enfermedad «cuando no era tan aceptada como ahora». Sobre el hecho de que el congreso se celebre en Andalucía, Díaz dijo que no es causalidad y recordó el esfuerzo pionero que se realiza en la comunidad andaluza para detectar el alzhéimer de manera precoz. Díaz lamentó que esta dolencia esté afectando cada vez a más jóvenes en pleno desarrollo laboral e incidió en la necesidad de que haya más atención de las administraciones y la sociedad civil para que las familias puedan soportar mejor el esfuerzo y el cariño que hay que dar en estos casos.

Por su parte, el secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Mario Garcés, destacó que «tenemos la obligación de recordar por aquellos que no pueden». Subrayó que en España hay un envejecimiento progresivo para que el que hay que estar preparado. Aseguró que «en 2065 habrá más de 200.000 personas con más de 100 años», por lo que entiende que hay que estar a la altura ya que seremos una sociedad de mayores e indicó que el alzhéimer «azota más a las mujeres».

La presidenta de la Ceafa, Cheles Cantabrana, advirtió que el 10% de las personas con esta enfermedad son menores de 65 años e incidió en la importancia de un diagnóstico precoz, ya que el 70% de las personas que están aquejadas por esta enfermedad no tienen diagnóstico. Explicó que se convierten en dependientes a los que se les niega la posibilidad de decidir sobre su destino, al tiempo que pidió ir en contra de la incomprensión porque «el alzhéimer arrebata la dignidad de las personas».