Los presos preventivos --pendientes de juicio-- del terrorismo yihadista ya han alcanzan, este año, la cifra de 61 personas apresadas superando, por primera vez, a los que se encuentran en prisión provisional en relación con la banda terrorista ETA, que no son más de cuarenta. "Por primera vez se ha invertido la pirámide" entre presos preventivos por terrorismo de corte islamista y aquellos vinculados a ETA, destacó ayer el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza.

El fiscal jefe estima, además, que la cifra total de presos preventivos por yihadismo "podría llegar al centenar" a finales del presente año de seguir "a este ritmo" las operaciones policiales que se están realizando para neutralizar el fenómeno yihadista en España.

CIFRA RECORD Son cifras que reflejan el auge del fenómeno yihadista al amparo del autodenominado Estado Islámico (EI) y el paulatino descenso en la actividad de ETA y sus satélites desde que la banda anunciara el alto el fuego definitivo en el 2011.

En los cuatro primeros meses de este año ya se ha superado al total de presos que ingresaron en el 2014 en prisión en relación con grupos terroristas de corte islamista: el Estado Islámico o DAESH, AQMI (Al Qaeda en el Magreb Islámico) o MUYAO (Movimiento para la Unión de la Yihad en el Africa Occidental).

Según datos proporcionados por la fiscal Dolores Delgado, coordinadora de asuntos de terrorismo yihadista en la Fiscalía de la Audiencia Nacional, del total de 61 presos por yihadismo que aguardan ser juzgados en las cárceles españolas, 28 ingresaron en prisión en lo que va de 2015; 21 en 2014, y 11 en 2013.

Los menores que también ingresaron, de forma preventiva, en centros de internamiento por su relación con el yihadismo son ya el doble que el año pasado. En el 2014 solo fueron dos y en lo que va de año, cinco.

Una de las menores detenidas en 2014, una ceutí de 15 años, dejaba el pasado viernes de engrosar esa lista de preventivos al aceptar, en un acuerdo de conformidad con la Fiscalía, una condena a dos años de internamiento en régimen cerrado a cambio de admitir que tras ser captada en las redes sociales se disponía a viajar a Irak o Siria para integrarse en el EI.

De los actuales 61 presos preventivos, la Audiencia Nacional juzga ya, desde el 25 de marzo, a los 11 que ingresaron en prisión provisional en el 2013 tras ser detenidos en la llamada operación Cesto y para los que la Fiscalía pide penas de entre 10 y 12 años de cárcel por dedicarse al reclutamiento de yihadistas para enviarlos a luchar a Siria. El siguiente juicio será a otros cinco detenidos en junio del 2014 por su supuesta relación con la captación y envío de personas al EI.

El aumento de operaciones para desarticular células yihadistas, bien dedicadas al envío de muyahidines a Irak y Siria bien con intenciones de atentar en territorio español --como la célula desarticulada este mes en Cataluña-- ha provocado que en el 2015 se hayan incoado 60 diligencias en los seis juzgados centrales de instrucción de la Audiencia Nacional, cuando en todo el 2014 fueron 79.