La Policía ha detenido a cinco personas en una amplia operación contra la distribución de pornografía infantil a través de las redes sociales, incluido un hombre acusado de abusar de su sobrina de 3 años y grabar sus abusos, quien ha ingresado en prisión por orden judicial. Según informó ayer la Policía, además de las cinco detenciones, se ha tomado declaración a otras tres personas en calidad de investigadas.

La investigación se inició gracias a informaciones recibidas a través de los protocolos de colaboración establecidos entre el Homeland Security Investigation de los Estados Unidos y la Policía Nacional en las que se alertaba de varios perfiles de una conocida red social que habían compartido archivos de contenido pedófilo. Una vez identificados y localizados los presuntos autores, se procedió al registro de sus domicilios y a examinar los distintos dispositivos y soportes en los que pudieran almacenar archivos pedófilos. Uno de ellos, un hombre residente en Cantabria, tenía almacenadas en su teléfono móvil fotografías y vídeos de abusos sexuales a una niña de solo tres años, cometidos presuntamente por el arrestado.

Los agentes comprobaron que la menor era la sobrina del detenido, quien había aprovechado las ocasiones en las que los progenitores de la niña la dejaban a su cuidado. El juez instructor decretó su ingreso en prisión.

En la provincia de Ciudad Real, la Policía ha detenido a otro hombre, de 35 años, por compartir material pedófilo en internet y por iniciar contactos sexuales con menores de edad, a las que había convencido para que le enviaran fotografías suyas desnudas o de índole sexual.

Los ciberagentes están tratando de identificar a las víctimas, gran parte de ellas extranjeras, y analizando el material intervenido para descubrir nuevas afectadas. El resto de las detenciones se han producido en Cádiz, Almería y Sevilla. El arrestado en la capital andaluza es un hombre natural de Nicaragua, de 18 años, que había compartido con otros usuarios un elevadísimo número de archivos pedófilos, siendo uno de los más activos distribuidores detenidos recientemente.

Su madre -que ha sido igualmente investigada junto con su marido por estos hechos-, además de conocer sus actividades, colaboró con él formateando su ordenador ante la sospecha de que pudiera estar siendo investigado por la Policía.

Por su parte, el detenido en Almería contaba con antecedentes por hechos similares y por agresión sexual. El hombre arrestado en Cádiz era un activo usuario de mensajería instantánea.