El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha avalado el despido de una empleada de El Corte Inglés en Tenerife por continuas faltas de respeto hacia sus jefes y compañeros y por varios casos de mala atención a sus clientes, como el de revelar a una niña que Papá Noel era su madre.

La sentencia, fechada el 1 de junio, pero dada a conocer ayer por el portal especializado Diario La Ley, confirma un fallo anterior de un juzgado de lo Social de Santa Cruz de Tenerife que consideró justificados los motivos de la empresa para proceder al despido disciplinario.

La vendedora ya había sido sancionada con anterioridad con 16 días de suspensión de empleo y sueldo por una falta muy grave por su «actitud pasiva, negativa, poco diligente y muy alejada de la profesionalidad exigida» en el trato con los compañeros y superiores y por escaso cuidado en la atención a varios clientes.

El TSJC entiende que protagonizó algunos episodios de maltrato a los clientes que resultaron embarazosos para su departamento. Entre ellos, cita el de revelar a una niña que acompañaba a su madre en una compra navideña quién estaba detrás de Papá Noel. La madre se quejó al jefe del departamento, que pidió disculpas a la clienta.

El Corte Inglés añadía en la papeleta de despido otro caso también relacionado con la Navidad, como decir a un cliente que el 24 de diciembre no era un «día para comprar en el centro (comercial)», con el argumento de que eso «no es lo nuestro», sino que «lo nuestro son los Reyes». Sorprendido, el cliente le respondió que esa no era una actitud «muy comercial» y exigió que lo atendiera otro vendedor.

El TSJC reconoce que las faltas que se han probado en el comportamiento de esta vendedora, por separado, solo son leves o graves, pero en ningún modo tienen carácter de muy graves. Sin embargo, precisa que «no se trata de hechos aislados, sino de una continuidad durante tres meses en una actitud en sus cometidos falta de buena fe».