Ni las limitadas reformas emprendidas por el Gobierno ni la mejora muy relativa de la economía frenan el drama de los desahucios. Al contrario. Durante el segundo trimestre de este año las ejecuciones hipotecarias iniciadas sobre viviendas habituales de las familias han crecido el 8,4% respecto al mismo período del 2013, según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

La cifra total redondea la dimensión de drama: 9.611 familias se vieron camino de perder la casa que tenían en propiedad en solo el periodo que fue de abril a junio. Más de cien cada día. Pero los desahucios no afectan solo a las viviendas habituales. Es la cara más dramática del fenómeno, pero no la más numerosa. Las fincas urbanas no destinadas a vivienda (locales, garajes, oficinas, trasteros, naves), inmersas en un proceso judicial han sido 10.524. Y el conjunto de todo tipo de fincas, incluidas las rúticas, alcanzó las 32.960.

El INE publicó el pasado julio por vez primera este indicador de ejecuciones hipotecarias con los datos del primer trimestre. Fue un gran avance frente a a los datos que se manejaban hasta entonces procedentes del Consejo General del Poder Judicial, más genéricos, y del Banco de España, menos completos. Con la primera entrega del estudio pareció abrirse una puerta a la esperanza al registrar un descenso del 4,2% en las viviendas habituales.

LAS CAUSAS Pero con su experiencia sobre el terreno, los portavoces de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) ya advirtieron entonces de que la situación no había mejorado. Ahora, las nueva cifras les otorgan la razón. No solo la situación no ha mejorado, sino que ha empeorado. "La reforma que llevó a cabo el Gobierno tirando a la basura la iniciativa legislativa de dación en pago que presentamos con un millón y medio de firmas no funciona, como puede comprobarse y vemos nosotros cada día", indicaron ayer.

La nueva estadística ofrece datos que dan pistas claras sobre las causas de la gran mayoría de los desahucios. El 70% de los iniciados en el segundo trimestre lo fueron sobre hipotecas contratadas entre el 2004 y el 2008, en plena burbuja inmobiliaria, cuando el sector financiero flexibilizó los criterios para prestar dinero. Los importes concedidos llegaban a superar en ocasiones el 100% de la tasación y esta se estiraban al alza para llevar el importe incluso más allá a ese límite.

El peor año fue el 2007. De este año, en el que empezaban a notarse los primeros síntomas de la crisis, provienen el 21% de las ejecuciones lanzadas en el segundo trimestre. El 17% de la hipotecas fueron firmadas el 2006 y el 10% en el 2008.

CLASIFICACION TERRITORIAL Por comunidades autónomas, Cataluña lideró las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas con un total de (3.994), seguida de Andalucía (3.981). En el lado opuesto se situaron La Rioja (61), País Vasco (94) y Navarra (118).

El INE destaca en su nota que el porcentaje de desahucios en viviendas habituales es relativamente bajo ( 0,052%) respecto a los 18,3 millones de pisos de uso familiar registrados en España. El instituto también recuerda que la estadística está basada en las certificaciones de ejecuciones inmobiliarias iniciadas que constan en los registros de la propiedad pero que no todas acaban en desahucio.