Dos diseñadoras cordobesas, Ana Torres y Matilde Cano, fueron ayer las protagonistas de los desfiles de moda nupcial que se celebran en Barcelona dentro de la Bridal Fashion Week, la feria de moda nupcial que tiene lugar estos días en la Ciudad Condal.

La firma de la diseñadora cordobesa Ana Torres presentó su nueva colección primavera-verano, que lleva por nombre Caricias. Fuentes de la firma han precisado que fue uno de los desfiles más aplaudidos, contando con una gran afluencia de público profesional de la moda y con muchas caras conocidas de la socialité catalana. Los más de 30 años de experiencia en el sector de la moda y la trayectoria expansiva de la compañía, que ya exporta a más de 30 países, logran que el público del mismo sean profesionales de las más variadas nacionalidades. Yolanda Ruiz, esposa del portero de la selección nacional de fútbol Pepe Reina, ha colaborado como modelo con Ana Torres. Además, la cantante Tamara ha sorprendido a todos poniendo su voz en directo para amenizar un desfile que comenzó con un predominio de prendas románticas y sofisticadas, con laboriosos y dulces plisados, sutiles devoré en tonalidades lavanda, glicinia y gris con suaves estampaciones, aplicaciones y lujosos bordados joya. A continuación se mostró una línea más atrevida, con sensuales asimetrías, fantasías en mangas, flecos de cristal y plumas, tejidos metalizados con lúrex, así como volúmenes en jacquards y sedas naturales.

Por su parte, la colección de verano de Matilde Cano es un universo regio nupcial. La silueta femenina se resalta con corsés y corpiños inspirados del crisol de culturas que también se reflejaba en la indumentaria del medievo ibérico. Las mangas cobran protagonismo por su ampulosidad, romanticismo, volatilidad y movimiento.

La nueva colección nupcial de la firma cordobesa marca un punto de inflexión en la tendencia identitaria de Matilde Cano, guardando la esencia de la femineidad atemporal de la belleza de la mujer, que en esta ocasión se enfunda en telas consistentes, materiales nobles, casi joyas que hacen tener protagonismo y presencia en las ocasiones más especiales.

Matilde Cano da en esta ocasión importancia a las capas, corsés, mangas acampanadas, sin olvidar, en ningún caso, los volantes, sello de casa, firma andaluza que no huye ni aparta su identidad porque además, así se logra dar movimiento a las prendas que siluetean a la mujer.

Una de las diseñadoras creativas de la firma, Marisa Gutiérrez, explica que «la colección se inspira en ese crisol de cultura que evoca la Edad Media, cuando los tejidos eran un bien preciado en el que los materiales eran una pieza exquisita». Y, por supuesto, la inspiración en la indumentaria de pueblos bárbaros, musulmanes, la evolución del vestido romano y bizantino propio del medievo ibérico se plasma en los corsés, corpiños entallados dibujando líneas silueteadas muy favorecedoras.

Juego de bordados, brocados, tules y ornamentos irisados en una propuesta creativa en la que la mujer, cargada de sensualidad, se viste para una ocasión especial sin abandonar en ningún momento su cotidianeidad pero manteniendo al mismo tiempo la elegancia de las damas medievales.

La paleta cromática versa sobre una oda a pasteles, tonos dulces que avanzan hacia una escala de color pero con estilismos suaves y delicados. El dorado siempre suma, sin olvidar los grises plateados, llevando esto a tonalidades que combinan entre sí con tonos opuestos como pueden ser los blancos y negros.