El Juzgado de lo Penal número 2 de Almería ha condenado a penas de 15 meses de prisión por un delito de maltrato animal agravado al joven trabajador de una explotación porcina que mató a saltos 79 lechones y al compañero de trabajo que grabó un vídeo que fue difundido por WhatsApp. El juez los inhabilita además para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales durante tres años y seis meses y les impone el pago de una indemnización de 4.470 euros, 60 euros por cada lechón, a la empresa propietaria de los animales, si bien los absuelve de un delito de daños.

La sentencia relata cómo los acusados, D.A.A. y M.R., que tenían 19 y 22 años en aquel entonces, se encontraban sobre las 13.00 horas del 7 de enero de 2016 en la explotación porcina de Huércal-Overa (Almería) en la que ambos trabajaban realizando el traslado de un «gran número de lechones de entre 19 y 27 días de vida».

Los acusados llevaban a los animales recién destetados a un módulo de recría y cuando se encontraban «agrupados y apretujados en un tractor», D.A.A., «de manera injustificada y cruel», decidió saltar sobre el grupo de lechones y se lanzó sobre ellos tras coger impulso «como si se tratara de una piscina». El magistrado señala que eran los lechones los que amortiguaban su caída y que llegó a realizar, como mínimo, tres saltos sobre el grupo de animales. Los animales fueron muriendo en días sucesivos.

Mientras tanto, M.R., que era responsable de la tarea de traslado de los lechones, además de ser el encargado de retirar los lechones que pudieran quedar muertos, «en lugar de impedir la acción de D.A.A. y velar por la integridad de los animales, grabó la escena con el teléfono móvil del otro acusado». Subraya el juez que lo hizo «sin interrumpir la acción en ninguno de los tres saltos que se grabaron, grabación que, posteriormente, fue difundida a través de las redes sociales, hasta que la misma llegó a conocimiento del responsable de la empresa».