La cocaína incautada a bordo de un velero de narcotraficantes, interceptado esta semana cerca de Canarias, habría alcanzado un valor de 65 millones de euros en el mercado, según se informó ayer durante su desembarco en Las Palmas de Gran Canaria. En la capital isleña bajaron a tierra, además, los tres detenidos en la operación -un británico, patrón de barco, ya conocido por conducir envíos de estupefacientes, y dos ciudadanos franceses que viajaban con él- que permitió intervenir los 1.850 kilos de droga que trasladaban a Europa. Todos ellos fueron sorprendidos cuando, el miércoles pasado por la noche, asaltaron su velero agentes de la Agencia Tributaria y de la Policía Nacional que, en el marco de una operación conjunta denominada Gru, les abordaron en alta mar cuando estaban a más de 200 millas de las costas de El Hierro, la isla más occidental del archipiélago canario, informa Efe.

Uno de los tres detenidos llegó a ocultarse entre los sesenta fardos en los que estaba distribuida la cocaína, según ha relatado la delegada regional de la Agencia Tributaria, Carmen Guillen. La aprensión de la droga -según explicó Guillen- fue producto de investigaciones iniciadas en 2015, que permitieron confirmar la existencia de una organización dedicada a transportar cocaína de América a Europa empleando distintos veleros que se relevaban en un mismo viaje, transbordando la carga de unos a otros en alta mar, a fin de dificultar su incautación. Una táctica de despiste que no evitó, en todo caso, que se lograra confirmar quince días atrás la partida de una embarcación con la droga ahora intervenida desde un puerto de Surinam rumbo a costas españolas, por lo que se le hizo un seguimiento que permitió constatar a principios de semana que la mercancía ilícita se encontraba en esos momentos en el velero Pepper Sauce, de bandera británica. El inspector jefe de la Unidad de Droga y Crimen Organizado Central de la Policía Nacional Alberto Morales ha destacado que uno de los indicios que apuntaló sus sospechas de que el velero transportaba droga fue que estuviera capitaneado por su patrón británico, un delincuente ya conocido por ser «un histórico» en ese tipo de actividades ilegales cuyo rastro era seguido desde más de año y medio atrás. Si bien ha insistido en que se contaba con otras pistas acumuladas en investigaciones que se venían desarrollando desde hacía dos años y medio y que, de hecho, ya habían permitido interceptar otro buque con cocaína más de un año antes. La Policía no ha efectuado más arrestos ya que solo se presume que se planeaba introducir la cocaína en Europa a través de las costas de España o de Francia, pero no el sitio concreto.