Los residentes de 700 apartamentos ubicados en cuatro bloques del barrio londinense de Camden tuvieron que abandonar el viernes en plena noche sus hogares después de que esos edificios fueran declarados inseguros, entre otras cosas, por el riesgo de incendio de su revestimiento, similar al de la torre Grenfell.

Las familias recibieron el aviso a última hora del viernes y un centenar de personas, entre ellas ancianos y bebés, pasaron la noche en camas inflables en un centro deportivo, en medio de escenas de confusión y caos, informa Efe. Por orden del Ayuntamiento del distrito, todos los afectados deberán trasladarse a casa de familiares o a hoteles reservados por el consistorio durante las tres o cuatro semanas que se prevé que duren las obras para cambiar el revestimiento inflamable de los edificios. Un total de 83 personas se negaron dejar sus apartamentos. La primera edil del distrito, Georgia Gould, justificó la orden de evacuación inmediata porque «la seguridad de los residentes es la prioridad», y reveló que, además de la falta de medidas antiincendios, se detectaron en los bloques problemas con las tuberías del gas. «Grenfell lo cambia todo y opino que no podemos correr ningún riesgo con la seguridad de nuestros residentes», manifestó. En un mensaje de Twitter, la primera ministra británica, Theresa May, ofreció su apoyo a «los residentes de Camden.