Un dispositivo policial ayudado por una excavadora y una desbrozadora trabaja desde ayer en la búsqueda, de nuevo, del cadáver de Marta del Castillo -asesinada en 2009-, en un lugar entre Sevilla capital y la localidad vecina de Camas que no había sido rastreado hasta ahora. Concretamente, la búsqueda se centra en una zona intermedia entre la salida de Sevilla por el puente del Alamillo y la desviación hacia Mérida por la autovía A-66, donde los agentes comenzaron a trabajar con las primeras luces del día, tanto policías uniformados como de paisano.
Se trata de un lugar de difícil acceso, al que se llega por un camino de tierra de unos 500 metros desde el polígono donde se encuentra el tanatorio de Camas, concretamente un punto situado en el margen izquierdo del puente, donde el hermano del asesino confeso, Miguel Carcaño, realizaba prácticas de tiro por su profesión de vigilante jurado. En ese punto trabajó ayer una máquina excavadora que sacó tierra desde un metro de profundidad, mientras que un operario con una desbrozadora se encargó de limpiar el terreno para que el trabajo de la excavadora fuera lo más limpio y eficaz posible.
El dispositivo trabajará en la misma zona al menos hasta el próximo jueves para rastrear unos 1.500 metros cuadrados de terreno, según fuentes de la investigación, que han precisado que la idea es apurar la luz solar durante los días de búsqueda, para iniciar de nuevo a las 8:00 horas del día siguiente.
La última búsqueda tuvo lugar el pasado mes de febrero en la dársena del río Guadalquivir en Sevilla, que finalizó el día 24 de ese mes tras cinco jornadas sin que se hubieran encontrado indicios de que el cadáver de la joven hubiera sido arrojado allí.
