Las autoridades australianas alertaron este miércoles del riesgo de utilizar aparatos con baterías en los aviones después de que una pasajera de un vuelo entre Pekín y Melbourne sufriera quemaduras al estallar sus auriculares.

La mujer estaba escuchando música con unos auriculares que disponían de pilas propias cuando el dispositivo explotó y se incendió mientras dormía, según un comunicado de la Oficina para la Seguridad en el Transporte de Australia (ATSB, siglas en inglés). La pasajera, que sufrió quemaduras en el rostro y cuello, tiró el aparato al suelo e intentó apagar el incendio con los pies.

La mujer le dijo a la ATSB que estaba durmiendo y escuchando música cuando escuchó una explosión. "Cuando me di la vuelta sentí que me ardía la cara", dijo a la ATSB, que emitió una declaración el miércoles como una advertencia a otros pasajeros. La mujer, que no fue identificada, dijo que se arrancó los auriculares y los arrojó al suelo, donde vio que saltaban chispas y pequeñas llamas.

"Cuando iba a poner mi pie sobre ellos, los asistentes de vuelo ya estaban allí con un cubo de agua, los pusieron en el cubo en la parte trasera del avión", contó.

La batería y parte de la cubierta de los auriculares se derritieron y quedaron pegados al suelo de la cabina a causa del fuego que, según ATSB, se originó en las baterías.

La ATSB no dio a conocer la marca de los auriculares que explotaron en ese incidente ocurrido el 19 de febrero pasado y que sigue a la serie de incidentes en todo el mundo por los fallos de las baterías del Samsung Note 7.