Diego, encarcelado por acosar a Patricia, la madre del niño, sigue bajo la lupa de los investigadores. Ayer se supo que, tras romper la orden de alejamiento, a mediados de enero, un juez dictó una orden de búsqueda y captura contra él que, tras una semana, dio frutos. El hombre fue localizado en un hospital psiquiátrico de Córdoba. Estaba ingresado por un trastorno bipolar. Sufría una situación de enajenación importante causada por su obsesión con la madre de Gabriel que le impelía a seguirla por todas partes. Algo que parece ahondar su situación de principal sospechoso, aunque la Guardia Civil sigue sin tener ninguna prueba determinante que permita encausarlo. La familia de Gabriel Cruz anunció ayer la convocatoria de una concentración que tendrá lugar el viernes.