Fernando Blanco Botana y Margalida Garbau, los padres de Nadia Nerea, declaran este viernes ante el juez de La Seu d'Urgell (Lleida) que ordenó este miércoles la detención de ambos acusados de estafar a muchas personas y empresas pidiendo dinero para supuestos tratamientos de la niña.

Blanco permanece en comisaría mientras que Garau está en libertad para atender a su hija, que tiene once años y está enferma de tricotiodistrofia. Su domicilio ya fue registrado por orden del juez.

El abogado de ambos, Alberto Martín, declaró en el programa Espejo Público de Antena 3 TV que los padres se preocupaban por la niña y pidió que no se tengan en cuenta los antecedentes de Blanco, que cumplió prisión por estafar a la empresa donde trabajaba en Menorca. Según el letrado, que fue presentado como "portavoz de la familia", la pareja "no tiene dinero ni patrimonio que pueda incriminarles".

En Tele 5, el abogado declaró que "el dinero que no está en la cuenta se ha destinado al beneficio de la niña", que el último dinero recaudado está en la cuenta corriente y que "no todos los viajes y los pagos dejan rastro".

Según informaciones del diario El País, la pareja ni siquiera tiene patrimonio a su nombre, tras un largo historial de embargos y condenas, especialmente del padre.

La tía de la pequeña, Cati, explicó a Tele 5 que la familia de Marga no sabía nada del pasado de Blanco ni de la supuesta estafa y se mostró dispuesta a quedarse con la custodia de la niña en caso de que el juez se la retire a sus padres. Y que incluso la abuela octogenaria se pasaba el tiempo de las supuestas operaciones en Houston rezando por su nieta.