La Guardia Civil ha detenido a 15 personas, once españoles, tres magrebíes y un rumano, que presuntamente pertenecen a una banda dedicada a introducir en el país grandes cantidades de hachís, sustancia de la que han sido intervenidos 8.936 kilos.

La Operación Knigt se ha dividido en dos fases durante las que se han practicado 24 registros en las localidades almerienses de Adra, Balanegra y El Ejido, así como uno en la gaditana de Algeciras, donde se ha intervenido gran cantidad de material, herramientas y medios de transporte utilizados por la organización, informa la Comandancia de Almería en una nota.

Los cabecillas de la organización residían en la provincia almeriense, si bien actuaban en la zona del Estrecho de Gibraltar y Algeciras. La organización tenía parte de su logística e introducían la droga por Cádiz y Almería, aunque la organización realizaba su actividad por todo el arco del Mediterráneo hasta Alicante.

Cuatro residentes en Almería ejercían como cabecillas del grupo y cada uno de los componentes de la banda tenía una función específica en la que se había especializado, contando con buzos expertos, encargados de manejar los alijos de hachís una vez fondeados en el agua.

Esta organización se dedicaba al tráfico de hachís haciendo uso de embarcaciones neumáticas de 14 metros de eslora, conocidas como gomas, con las cuales una vez cargadas de hachís se dirigían a las costas almerienses.

De otra parte, el Plan de Seguridad del Campo de Gibraltar puesto en marcha por el Ministerio del Interior hace 15 días ha dado ya sus primeros resultados con la incautación de más de 6.000 kilos de hachís, ocho detenidos y elgolpe a la red de blanqueo. EFE