Diez miembros de una misma familia francesa viajaban en el avión de Air Algérie siniestrado, informaron hoy medios locales, según los cuales todos ellos se habían desplazado hasta Burkina Faso de vacaciones. Se trata, según indicaron los diarios 'Le Dauphiné Libéré' y 'Le Progrès' en su edición digital, de Michel Reynaud, de su exmujer, Michèle, de sus dos hijos, de sus dos nueras y de sus cuatro nietos, entre los cuales dos tenían 14 y 16 años de edad. En total, en el avión de la compañía española Swiftair, operado por Air Algérie, había 54 franceses, entre los cuales se incluye a personas con doble nacionalidad. Sus familiares, según se detalló ayer en conferencia de prensa en París, serán recibidos hoy en el Ministerio de Exteriores por el presidente francés, François Hollande, con el objetivo de darles la información disponible sobre lo sucedido. El ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius, informó ayer de que los restos mortales de las víctimas del avión serán transportados en un primer momento a la ciudad maliense de Gao, antes de ser repatriados a sus respectivos países. Francia ha enviado al lugar de la catástrofe un equipo de expertos del organismo encargado de la investigación de accidentes aéreos, el BEA, y forenses de la Gendarmería. Por su parte, una delegación española compuesta por dos miembros de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC) se sumarán al equipo encargado de investigar los motivos del accidente y analizarán sobre el terreno los restos del avión.