Doce pasos y cerca de 400 figuras pertenecientes a setenta corporaciones bíblicas desfilaron entre el Jueves y Viernes Santo por las calles de Puente Genil, durante los días en los que se celebró el amor fraterno y se recordó la muerte del Señor.

El Viernes Santo comenzó temprano, a las siete menos cuarto, ante el Calvario de Jesús Nazareno, con la interpretación de la Diana, alabanza al Terrible a cargo del Imperio Romano ante una plaza masificada de fieles que han guardado un respetuoso silencio.

Después y amaneciendo, Jesús Nazareno inició el recorrido con la túnica de Vergara, según informó su cofrade mayor, Francisco Javier Reina. El hermano mayor fue José Luis López y el nazareno de honor, el capitán del Imperio, Manuel Reina Gómez.

Tras El Terrible, el Cristo de la Misericordia, y al frente de la cofradía, Ezequiel Espejo, como cofrade mayor. El hermano mayor de la estación de penitencia ha sido Clemente Jiménez, que lleva 32 años siendo hermano de la cofradía y hermano de Los Samaritanos.

Con tres turnos de bastoneros, la cofradía de San Juan Evangelista y Nuestra Señora del Mayor Dolor ha procesionando bajo la dirección de Tomás Cabezas, cofrade mayor en funciones y al mismo tiempo hermano mayor.

Cerraba la procesión el palio de María Santísima de los Dolores. Este año el hermano mayor ha sido Francisco Chacón, presidente de la corporación bíblica de las Sectas Judaicas de Israel y Discípulos de Emaús. Y continúa en el cargo de cofrade mayor, Fernando Chacón.

El Jueves Santo, como es tradición, desfiló el Imperio Romano por la calle de la Plaza estrenando pasodoble. Y desde la ermita de la Veracruz, la cofradía del Preso con su cofrade mayor, Manuel Lora, y el hermano mayor de la estación penitencial, Francisco Morales García. Tras la campanita se incorporaron las figuras bíblicas del Antiguo y Nuevo Testamento, entre ellas, los titulares.

La cofradía de la Veracruz y el Cristo de la Columna sigue dirigida por Gonzalo Galisteo como cofrade mayor. Los hermanos mayores de la estación penitencial fueron Francisco Ruiz y José Luis Yerón. Cerró la cofradía de María Santísima de la Esperanza, que bajo el mandato de Rafael Aranda como cofrade mayor, reestrenaron los doce varales.

El Viernes Santo por la noche procesionaron el Santísimo Cristo de la Buena Muerte, la hermandad de las Angustias, San Juan y María Santísima de la Soledad, que estrenó saya, que ha sido regalo del hermano mayor, Pablo Jiménez.