Desde la iglesia de Santiago, de donde saldrá a las 18.35 horas, será un recorrido austero (como la hermandad), sobrio (como sus raíces) y muy directo y lineal, casi con las mismas calles en el recorrido de ida que en el de vuelta. Y sin embargo, con detalles y cierto espíritu distinto. Y es que tras 20 años llegando a la Catedral, «es un hito que todas las hermandades vayamos este año, que es lo suyo», sentenciaba ayer el hermano mayor, Francisco López Enríquez. Y sí... será la primera vez que las aguas del Guadalquivir reflejen la imagen de la Soledad. Que no es poco para el río.