La Madrugá de la Semana Santa sevillana ha acabado minutos antes de las tres de la tarde del Viernes Santo con el regreso a sus templos de las tres cofradías señeras de esta jornada: La Maracena, la Esperanza de Triana y el Cristo de los Gitanos.

Un cielo gris ha mitigado el calor que ha marcado hasta ahora la Semana Santa en Sevilla que, a diferencia de los últimos años, no ha perdido ninguno de sus desfiles procesionales por la lluvia y ha sido seguida por un ingente número de devotos, turistas y curiosos.

La entrada de La Maracena, la Esperanza de Triana y el Cristo de los Gitanos en sus templos ha sido presenciada por miles de personas que han aplaudido las sucesivas "levantás" con las que los costaleros adornan los últimos momentos de las estaciones de penitencia, en los que no han faltado tampoco las "petalás", lluvias de flores con las que los vecinos reciben a sus imágenes al regresar a sus barrios.

El buen tiempo va a permitir, esta tarde, la salida de las siete hermandades que procesionan el Viernes Santo, las más afectadas por la lluvia en los tres últimos años, en especial el Cachorro, una de las tallas más importantes y de mayor valor artístico de la Semana Santa sevillana, lo que ha impedido su salida en numerosos años durante la última década por la amenaza de lluvia.

El Cachorro afronta uno de los recorridos más largos y menos protegidos de la Semana Santa sevillana por lo que sólo realiza su desfile procesional sin amenazas meteorológicas.

Junto a la imponente talla anónima del moribundo Cristo del Cachorro también procesionarán esta tarde la hermandad de la Carretería, en el céntrico barrio del Arenal; la Soledad de San Buenaventura; la trianera Virgen de la O; San Isidoro; Monserrat y La Mortaja, uno de los desfiles más severos de la Semana Santa sevillana cuyo paso, compuesto por la talla de Jesús Descendido, obra de Cristóbal Pérez (1677) y la de María Santísima de la Piedad, anónima de fines del XVII, constituye una de las joyas del barroco sevillano.

La Semana Santa de Sevilla transcurre este año sin incidentes dignos de mención, según han informado esta tarde a Efe fuentes del Ayuntamiento hispalense, y con una masiva afluencia de turistas que vaticinan unos índices de ocupación hotelera superiores a los de los últimos años.