Una espléndida recreación de la Semana Santa cordobesa en el siglo XIX es lo que los cofrades, que anoche asistieron en el Gran Teatro al pregón de la Semana Santa 2012, pudieron escuchar de la voz de Enrique León Pastor, cofrade del Santo Sepulcro y del Cristo de Gracia.

El pregonero, que fue presentado por Blas Jesús Muñoz, alzó su voz para ir dando vida a un imaginario relato en relación a la Semana Santa cordobesa basado en hechos históricos, una historia novelada que comienza en 1852, tres años después de que la corporación Municipal restableciera en la ciudad las procesiones penitenciales.

León, a través de una cuidada prosa fue recreando un auténtico cuadro de costumbres donde, valiéndose de distintos personajes, va narrando la odisea de estos primeros cofrades para restituir las cofradías perdidas en el ostracismo , después del decreto del obispo Trevilla, que en la práctica estuvo a punto de terminar con siglos de tradición cofrade en aquellos convulsos tiempos.

La parte final del pregón, presidido como es tradicional por la magnífica Cruz Guiona, que reposa en la iglesia de San José y Espíritu Santo, recreó meticulosamente cómo transcurría en la ciudad la procesión oficial del Santo Entierro y cómo, poco a poco, a Córdoba le era devuelta su Semana Santa, "Era Cuaresma, era Semana Santa, estaba en Córdoba... y el incienso volvería a perfumar sacros vía crucis/Era Cuaresma, era Semana Santa, estaba en Córdoba... y el Hijo de Dios moriría y resucitaría en la Constantinopla de Occidente", concluyó el pregonero de la Semana Santa del 2012.

Previo al pregón, la banda de la Esperanza interpretó un pequeño concierto donde destacó el estreno de la recuperada marcha El Viernes Santo , compuesta en 1896 por Rafael de la Torre Brieva, y dedicada a la procesión oficial del Santo Entierro que se celebraba cada año en la ciudad.

MUSICA, HISTORIA Y EMOCION No menos mérito tuvo posteriormente la interpretación de la marcha Saeta Cordobesa , compuesta por Pedro Gámez Laserma en 1949. Sin embargo, quizás fue la composición que abrió el acto, Paloma de Capuchinos , de Francisco Melguizo, la que tuvo mayor carga emocional, al estar dedicada por la banda de La Esperanza al recientemente fallecido Diego Luque Lora, vocal de protocolo de la Agrupación de Cofradías y hermano de la cofradía y hermandad de la Paz y Esperanza.

AUTORIDADES Entre los asistentes al pregón, además del presidente de la Agrupación de Cofradías, Juan Bautista Villalba, estuvieron el obispo, Demetrio Fernández, los canónigos Juan Moreno, Francisco Jesús Orozco (vicario general de la diócesis) y Pedro Soldado, delegado diocesano para las cofradías. Por otro lado, el alcalde de Córdoba, José antonio Nieto, y el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, encabezaron la lista de cargos institucionales, con una notable representación de la Diputación (Pilar Gracia y Andrés Lorite) y del Ayuntamiento, con concejales como Rafael Jaén y Laura Ruiz, y de la oposición, entre ellos el expresidente de la Agrupación de Cofradías Francisco Alcalde (PSOE) y el portavoz de UCOR, Juan Miguel Alburquerque. Otros expresidentes de la Agrupación de Cofradías presentes en el acto fueron Rafael Zafra y Manuel Laguna. Finalmente, en el Real Círculo de la Amistad se sirvió una cena en homenaje al pregonero.