El médico y académico cordobés Pedro Luis Pérez Castro acaba de publicar un libro digital e interactivo, que se puede descargar en su página web http://www.perezcastro.org, para contribuir al diagnóstico, prevención y tratamiento de los efectos del bruxismo. Esta enfermedad, conocida como rechinar de dientes, puede afectar a unos 250.000 cordobeses, un 30% de la población. Pérez Castro se licenció con la primera promoción de Medicina de Córdoba y se especializó en Estomatología en Madrid. Es profesor de la Sociedad Española de Prótesis y experto en la rehabilitación oral e implantes dentales. El libro, pionero en la literatura dental, viene prologado por los profesores Jaime Gil, catedrático de la Universidad del País Vasco, y Vicente Jiménez, profesor de la Universidad Europea de Madrid.

-¿Por qué decidió editar este libro?

-Es una recopilación de artículos sobre bruxismo que tenía en mi blog, www.perezcastro.org, por lo que decidí reunirlos y hacer una revisión de los mismos. Libros monográficos sobre bruxismo hay muy pocos, a pesar de que es una patología en toda regla que afecta a mucha población. Existe mucha información errónea sobre cómo abordar el bruxismo, pero con una correcta prevención se podrían evitar muchos males. Quería que la publicación fuera gratuita, porque mi objetivo es que aporte información y formación a las presentes y futuras generaciones de odontólogos.

¿En qué consiste el bruxismo?

-El rechinar de dientes aparecía ya en el Evangelio según San Mateo. El bruxismo a lo largo de la historia se conoce como un hábito involuntario, como una alteración del sueño. Pero el bruxismo es una patología que afecta al ser humano y su signo característico es el desgaste y rechinar de dientes por la noche, pero realmente es una alteración de la función oral que debe ser tratada. El siguiente paso tras el tratamiento sí puede ser colocar al paciente una placa de descarga por la noche, pero no implica únicamente el desgaste de dientes, sino que además lleva asociado patologías a nivel de las articulaciones temporomandibulares, contracturas musculares o cefaleas. Por eso, quien debe coordinar el tratamiento de esta enfermedad es el médico estomatólogo o el odontólogo, aunque de forma complementaria el paciente pueda recibir atención psicológica o psiquiátrica, por su alta relación con el estrés, la ansiedad o la depresión.

-¿Cuál sería el tratamiento a seguir?

-Casi un 80% de los casos ya viene a la consulta diciendo que aprieta los dientes y que se levanta con esa sensación, por lo que sabemos que es bruxista. El tratamiento consiste en hacer primero un estudio funcional con un aparato que se llama articulador, se corrige la alteración funcional y por último se le pone la placa de descarga. Lo importante es prevenir el bruxismo en estudiantes, opositores y profesores jóvenes, que son los que se suelen ver más afectados, para evitar que a partir de los 50-55 años tengan ya la boca totalmente desgastada y necesiten una rehabilitación oral completa, complicada y cara.

-¿Cómo se puede prevenir?

-La prevención del bruxismo puede lograrse con un tratamiento de ortodoncia, para rectificar la forma de morder, o un ajuste oclusal, eliminando las interferencias que son las que provocan el rechinar de dientes, aunque cada caso es distinto.

-¿Qué está motivando el incremento de casos de este problema de salud?

-El auge del bruxismo se debe al aumento del estrés, ansiedad o estados depresivos. Durante los años de crisis se ha notado un aumento de afectados. El bruxismo afecta a alrededor del 30% de la población. Hay muchas personas que piensan que el tratamiento del bruxismo consiste únicamente en la colocación de una placa de descarga por la noche para dormir y como se ha dicho antes el tratamiento es más complejo. Es preocupante la cantidad de páginas en internet que aparecen vendiendo placas de descarga. Y no es que no sirvan para nada, sino que usadas erronéamente pueden perjudicar y agravar el bruxismo.