El Hospital Universitario Reina Sofía servirá el Jueves y Viernes Santo a los pacientes ingresados que no presentan restricciones terapéuticas en su dieta los platos y postres típicos de la Semana Santa, como el tradicional potaje o torrijas para merendar.

Según informa el complejo hospitalario en una nota, entre los almuerzos y las cenas de estos días festivos se repartirán alrededor de 4.500 menús elaborados por los profesionales del servicio de alimentación del complejo sanitario con el fin de proporcionar una estancia más agradable a los pacientes durante su periodo de ingreso en estas fiestas.

El primer almuerzo especial, que se servirá el Jueves Santo, incluye crema de marisco, solomillo de cerdo al Pedro Ximénez con champiñón y helado. En la merienda, los pacientes podrán degustar batido y pestiños. Además, en la comida del mediodía del Viernes Santo podrán saborear potaje de garbanzos de cuaresma, atún encebollado con guarnición de ensalada clásica y macedonia de fruta natural. En la merienda, el Hospital servirá leche y torrijas.

Todos estos menús se preparan en la cocina del Hospital Reina Sofía por los profesionales del servicio de alimentación del centro, que se esmeran para que los pacientes puedan disfrutar de la gastronomía propia del calendario festivo anual.

Programa de comidas especiales

Dentro del programa de comidas especiales, el hospital también sirve menús más elaborados a los pacientes adultos e infantiles ingresados durante la Navidad, el Día de Andalucía y por la festividad de San Rafael.

En la cocina del hospital, teniendo en cuenta siempre estrictas medidas de seguridad e higiene, se preparan diariamente cuatro comidas para los más de mil pacientes hospitalizados que incluyen dietas especiales que precisan determinados enfermos a causa de su patología. Los menús del centro pueden ser normales, es decir, sin limitaciones en cuanto a los alimentos, o terapéuticos, cuando implican restricciones en función del estado de salud del enfermo (entre las que más se consumen figuran las diabéticas, trituradas y pobres en colesterol).