No solo a las Administraciones corresponde mantener nuestro entorno limpio. Es habitual encontrar bolsas de basura fuera de los contenedores y cualquier residuo voluminoso junto a ellos. Ý qué decir de los objetos de todo tipo que se deposita en los contenedores del extrarradio. En muchas ciudades y pueblos estas conductas, al igual que la de los propietarios de perros que siguen sin recoger los escrementos de sus animales, son objeto de duras sanciones. Es una pena que seamos tan incívicos, pero de una vez por todas deberíamos reaccionar. Los ciudadanos actuando como seres civilizados y los regidores atajando las conductas que nos perjudican a todos y que provoncan las protestas diarias de quienes deben soportarlas de cerca. A veces una medida impopular a tiempo que mejora la vida del municipio se convierte en la mejor tarjeta de presentación de quien gestiona un municipio.