El presidente de EEUU, Donald Trump, retiró hoy una invitación para visitar la Casa Blanca que había enviado a Stephen Curry, la estrella de la liga de baloncesto NBA que juega en los Golden State Warriors.

"Ir a la Casa Blanca se considera un gran honor para un equipo del campeonato. Stephen Curry está dudando. Por tanto, ¡la invitación se retira!", afirmó Trump en un mensaje en su cuenta personal en la red social Twitter.

Curry dijo esta semana que no quería que su equipo visitase la residencia presidencial para celebrar el título de la NBA logrado la temporada pasada.

"Yo no quiero ir", dijo el viernes el base de los Warriors.

Curry, premiado como jugador más valioso de la NBA dos veces, agregó: "con suerte, el no ir (a la Casa Blanca) inspirará algún cambio en lo que toleramos en este país y en lo que apoyamos, lo que se acepta y aquello ante lo que nos hacemos los tontos".

No está claro si Trump prohibiría el acceso a la Casa Blanca sólo a Curry o a todo el equipo, cuyos directivos han señalado que debatirán una decisión final.

Trump publicó su mensaje sobre Curry después de criticar ayer en un mitin en Alabama a jugadores de la liga de fútbol americano NFL que han hecho protestas durante la interpretación del himno nacional.

El presidente instó a los dueños de esos equipos a despedir a los jugadores críticos y añadió que, si los aficionados "abandonaran el estadio" cuando tienen lugar protestas así, esas "cosas pararían".

Agregó que los propietarios de entidades de la NFL deberían decirle a los deportistas rebeldes: "saquen a ese hijo de puta del campo ahora mismo".

Los comentarios de Trump provocaron hoy la reacción del comisionado de la NFL, Roger Goodell, quien aseveró en un comunicado que son "divisorios" y suponen una "desafortunada falta de respeto".