La próxima campaña citrícola, 2018-2019, se afronta desde la tranquilidad de la dotación de riego garantizada. La sequía ha sido la espada de Damocles durante muchos meses para el campo. Un riesgo real que amenazaba una superficie regable de 10.467 hecta´reas en Palma. La garantía de riego se traduce en que desde la comundiad de regantes de Bembézar se ha anunciado una dotación de entre 5.000 y 5.500 metros cúbicos por hectárea. Por otro lado, desde la cuenca general se ha autorizado una dotación de riego de 5.000 metros cúbicos. Datos que manejan en la comunidad de regantes de la Margen Izquierda del Genil señalan que las escorrentías y el deshielo en Granada ha provocado que no exista gasto de agua.

En cuanto al cierre de la campaña actual, la entrada de naranja de Egipto y Marruecos ha provocado una bajada de precios en la recta final. La última sesión de la mesa de cítricos de la Lonja de la Cámara de Comercio (31 de mayo), donde se abordó la campaña en la Vega del Guadalquivir, se puso de manifiesto que la cotización de la Valencia Late había bajado situándose entre 0,24-0,29 euros kilo. Esta variedad aparece con fecha 10 de abril entre 0,35 y 0,40 euros kilo.

Sin embargo, desde Palmanaranja la valoración del global de la campaña es positiva. Antonio Carmona dice que la campaña ha sido buena, destacando el primer tramo con las variedades Navelina y Salustiana.

Sobre los mercados siguen consolidándose línea de negocio en países asiáticos. Carmona, como gerente de Sunarán, confirma esta realidad señalando que «seguimos manteniendo nuestro mercado en Corea, China, Emiratos Árabes», afirma que hay oportunidades en Malasia, Camboya e Indonesia. Añade que a través del Instituto de Comercio Exterior y Extenda han realizado indagaciones de mercado en Japón.

Por último, Citrosuco ha revalorizado la naranja de zumo.