La investigación internacional ha constatado que fue una batería del Ejército ruso la que abatió en el año 2014 sobre cielo ucraniano un avión malasio con 298 pasajeros a bordo. Por mucho que se haya entorpecido la investigación y por mucho que se haya negado la evidencia y rodeado de misterio la tragedia, estamos ante 298 muertes de civiles inocentes que caen ahora sobre el líder ruso.