Los periodistas tendremos que entrar a El Arcángel por otra puerta. La decisión se ha tomado tras cazar
el delegado del equipo a uno de los gráficos que hacen fotos cada mañana al equipo apostado
junto a la puerta de la sala, oreja pegada, donde Sandoval daba la charla a sus jugadores. Sin vestido
negro ni gafas, pero al más puro estilo de la vieja del visillo.