Se connota con pesar y preocupación, aunque sea algo así como hablar para el que no escucha, que tanto el supuesto interés por el agro que nos atañe del PSOE provincial, como el que le concierne a su regional generalato, y por el referido al conjunto de nuestra comunidad autónoma, teniendo en cuenta, sobre todo, el gran peso en su economía del sector agroalimentario, entre otros, es rotundamente pobre y cicatero.

Siendo a tales efectos ese comportamiento como el de una hosca fachada, despreciando tras ella sus interinos dirigentes lo que presuntamente ignoran o, cuanto menos, haciendo oídos sordos de las evidencias, como lo es la decisión puntera y su correspondiente y enhebrado proyecto para la constitución de la Academia de Agricultura, con sede en esta capital, habida cuenta que de todo ello los responsables políticos, tanto en Córdoba como en Sevilla, teóricamente concernidos, conocen, estando suficientemente informados, sabiendo que la idea se pergeñó hace ya más de diez años, y que se propuso con hasta hoy inútiles, reiterativas y tozudas instancias, intentando despertar esas dormidas conciencias para una iniciativa que interesan, impulsan y apoyan prácticamente todas las instituciones provinciales, principalmente la Universidad, la administración, la empresa privada, la comercial y la financiera, así como un amplio y destacado elenco de cualificados técnicos y profesionales del mundo rural, de esas mismas entidades públicas y privadas y del ámbito del conjunto del territorio andaluz, si bien sea lógicamente mayoritario el correspondiente a esta provincia.

El PIB de la economía andaluza es el tercero de España, con más de 87.000 kilómetros cuadrado de extensión, la segunda a escala nacional, y casi 8,5 millones de habitantes censados en 2016. Lo revalida el volumen total de la renta producida y la población que mantiene. Predomina el sector agroganadero y forestal, localizándose la industria en la zona occidental, costera y núcleos de población, destacándose los más punteros de los centros rurales con relevantes empresas agroalimentarias.

* Doctor Ingeniero Agrónomo.

Licenciado en Derecho