La primera ministra británica, Theresa May, no tiene mayoría absoluta, así que ha tenido que llegar a acuerdos para garantizarse el apoyo a su gobierno. ¿Y con quién? Pues visto que en los actuales arcos parlamentarios conciliar diferentes ideologías es casi imposible, se ha tenido que ir, como el presidente Mariano Rajoy en España, a los territorios. E, igual que al señor Rajoy los votos del PNV y los partidos canarios le han costado (nos han costado a los españoles) varios miles de millones de euros, a la señora May el apoyo del ultraconservador Partido Democrático Unionista (DUP) de Irlanda del Norte le sale por un piquito de 1.300 millones de euros. Eso sí, el DUP no es nacionalista, sino partidario de la unión de Irlanda con el Reino Unido.