Condenado por dejar tetrapléjico a un guardia urbano en Barcelona --estuvo en la cárcel del 2006 al 2012--, irá a prisión por homicidio como presunto autor de una agresión de efectos irreversibles tras una discusión de cariz político en un bar, en el que pudo agredir a un hombre que llevaba unos tirantes con la bandera de España, que murió como consecuencia del golpe recibido.