El discurso del rey Felipe VI marca un tiempo distinto así como el hecho que provoca que todo cambie al respecto de las consecuencias, derivadas y derivables, de los recientes episodios correspondientes a la esquizofrenia secesionista de la región catalana; expresándose contundente, justa, concisamente y con irreprochable claridad. Lo que no ha agradado ni a los demagogos populistas y neoleninistas, antisistema, ni a los radicales de diferente pelaje, ni a los separatistas catalanes, ni a sus afiliados y acólitos, incluidas las cohortes pretorianas dedicadas a la propagada y la contaminación; como también ha disgustado a cierto sector del nacionalismo ultra y de la intoxicada y adocenada burguesía. Que así se esperaba.

Mas algunos desconcertados y ladinos inconformistas, ocasionalmente atemperando su desmedida radicalización, observando, con cierta frialdad e impostada templanza, que la cuerda muy tensada se acabaría rompiendo y todo concluiría, terminan proponiendo la mediación y el diálogo. En definitiva la internacionalización y la dilación sine die, que varios extienden hasta un mes, de la pretendida independencia, esperando que de esa forma, aunque un poco más tarde, la fruta madura les caiga en las manos, para volver a dirigir el rumbo de los acontecimientos y el ataque al Estado de derecho.

Sin embargo, no cabe diálogo alguno con el transgresor, con el chantajista, con los golpistas confesos, ni con los que los amparan, ni con aquellas huestes que valiéndose de su preponderancia consentida han incentivado el incendio utilizando para ello a una masa enfervorizada por la propaganda, la desinformación y el odio. Como tampoco con esos otros que desde la sombra entre bambalinas, y un anonimato a voces conocido, aparentemente impunes, engrasan la maquinaria y mueven los hilos de sus polichinelas y marionetas a sueldo.

Pero, finalmente, toda vez que plenamente se restablezca la legalidad constitucional, el entendimiento surgirá como algo habitual y cotidiano tan sólo sometido a las confrontaciones propias de un régimen democrático.

* Licenciado en Derecho. Doctor Ingeniero Agrónomo