En este Viernes de Dolores --nunca mejor dicho-- acabo de venir de una pequeña manifestación contra los recortes en la Sanidad Andaluza. Pequeña por el número de manifestantes pero importante por la calidad y justicia de sus peticiones. Llegando he recibido un whatsapp que me recomendaba la canción de Luna de Abril adornada de multitud de florecillas. ¡Las cosas de la vida en blanco y negro!, aunque lo cierto es que tanto la manifestación como la canción son un canto a la vida.

Venía pensando en los recortes en la Sanidad Pública Andaluza y me preguntaba si esos recortes se tienen que hacer necesariamente ahí. Faltan médicos y enfermeras, sobran genéricos y faltan marcas, falta investigación, falta cubrir las sustituciones a tiempo, sobra el copago de muchas familias, falta atender dignamente a enfermos con enfermedades raras, etc.

Me preguntaba si los recortes no se podrían hacer en el número de asesores que tienen nuestros políticos porque no tienen ni idea de los temas que tienen que resolver; me preguntaba si los recortes no se podrían hacer en los pluses de productividad que se cobran en la Sanidad andaluza “por conseguir los objetivos”; me preguntaba si los recortes no se podrían hacer --al menos un poco-- en los sueldos de los políticos y en sus magníficas condiciones de jubilación; me preguntaba si los recortes no se podrían amortiguar evitando las duplicidades de competencias entre las diferentes administraciones (local, provincial, autonómica y central); los españoles debemos ser bastante ingobernables pues necesitamos 18 Parlamentos para tan ¿ardua tarea?. Vale, tengámoslos, pero si las 17 regiones recortan a la mitad sus parlamentarios, sobran 634 políticos. Me preguntaba si los recortes no se podrían hacer limitando los gastos que los partidos políticos despilfarran en sus campañas electorales. Pues sí, también me he preguntado si los recortes no se podrían hacer en el dinero que roban con descaro ¡Hombre, en tiempos de crisis, al menos roba menos... Un poquito de solidaridad! Me preguntaba si las diputaciones provinciales son realmente necesarias y también me preguntaba por la necesidad de este Senado. Puestos a preguntarse me preguntaba porque no se hacen recortes en las radios y televisiones públicas convertidas en emisoras del respectivo partido que gobierna el ayuntamiento, CC AA o Gobierno central. Claro está que también se podrían recortar las mega-ganancias de algunos bancos y algunas multinacionales. Para terminar me pregunto si la gestión centralizada de algunas competencias --en concreto Sanidad y Educación-- no resultaría bastante más igualitaria y más barata para el conjunto de españoles.

Las voces y la presencia, en la manifestación, de gente que está sufriendo los recortes sanitarios en Andalucía me han generado todas esas preguntas. Posiblemente estas preguntas no sirvan para nada pero me gustaría que algún analista, asesor o economista me respondiera si esos recortes son posibles con voluntad política. Tengo la impresión de que técnicamente son posibles pero políticamente imposibles. ¡Una pena!... ¡ Y luego dicen que gobiernan para la ciudadanía!