El exfutbolista del Alcorcón defraudó alrededor de 15 millones de euros a 774 personas mediante una estafa piramidal en la que les llegaba a prometer un beneficio ficticio de hasta el 50% del dinero invertido, según la investigación policial. La supuesta estafa arrancó en noviembre de 2015 con la empresa ARC, que se dedicaba aparentemente a la inversión en el mercado de futuros.