No cabe otra. El agravio comparativo que sufre Córdoba en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) va a exigir que todas las fuerzas políticas de la provincia --al igual que las de Andalucía en torno a la escasa dotación para inversiones-- se planten y presionen en Madrid para que la situación cambie en el trámite parlamentario. Eso requiere colaboración entre partidos políticos de distinto signo, así como un esfuerzo para consensuar una jerarquía de prioridades. ¿Qué necesita urgentemente nuestra provincia? Sería un ejercicio de responsabilidad llegar a acuerdos al respecto y defenderlos ante el Gobierno central. Por su parte, la Junta anuncia que impugnará los PGE si se mantienen las actuales cuentas, sobre todo en materia de inversión, ya que «no cumplen con el Estatuto de Autonomía». Conseguir para Andalucía el 18% de la inversión, equivalente a su peso de población, es una reclamación legítima, siempre obviada por los gobiernos de turno.