No debería llegar un nuevo verano, con el calor que reseca el monte y los harto conocidos riesgos del fuego, sin que estuviera resuelto el problema de la falta de una pista para el aterrizaje de aviones contra incendios en la Sierra cordobesa. Si la pista de Los Villares, a pesar de haber sido utilizada en el pasado, no reúne los requisitos legales, el Gobierno está en su derecho y en su deber de no permitir su uso, excepto para helicópteros, como aclaró el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado. Y si adecuar la actual pista forestal de Los Villares para que reúna las condiciones exigidas requiere una inversión desmesurada, es razonable también que la Junta de Andalucía no se decida a hacerlo.

Las soluciones planteadas ahora son hacer la citada pista del Infoca en el entorno de El Vacar, aunque sería complejo (hay que buscar el suelo, adquirirlo y acondicionarlo), o --aunque esto gusta menos a los vecinos-- reforzar los servicios antiincendios desde el aeropuerto de Córdoba. La administración autonómica se muestra abierta a la búsqueda de soluciones que garanticen la seguridad del entorno natural y de los vecinos, de manera que lo único que parece faltar es que los actores implicados se pongan manos a la obra y aceleren la consecución del objetivo. Lo razonable sería que cuando llegue el verano del 2015 el problema esté resuelto.