Un indulto supuestamente humanitario concedido por el actual presidente de Perú ha dejado libre al expresidente Alberto Fujimori, sobre el que pendía una condena de 25 años por flagrantes violaciones de los derechos humanos en los años 90. A los pocos días, el que se decía muy enfermo ya abandonó la clínica y se trasladó con su familia a una lujosa mansión.