Aprovechando unas jornadas que tuvieron lugar hace poco en la Fundación Miguel Castillejo sobre el Colegio Cervantes y, a las cuales, me invitó por la presidenta de mi Asociación de Poesía «Alma poética» de Córdoba, tuve el honor y la inmensa suerte de conocer a una de las personas más importantes de dicho colegio y uno de los hombres más buenos que nos ha dado Dios y la especie humana a lo largo de toda la historia. Se trata de Isidoro Macías Martín (más conocido en el mundillo coloquial como el Padre Patera. Nacido en Minas de San Telmo (Cortegana, Huelva, 1945), es un religioso católico, franciscano de la Cruz Blanca española, conocido por su trabajo humanitario en Algeciras a favor de los inmigrantes subsaharianos que cruzan el estrecho de Gibraltar.

Toda una vida entregada a los más pobres y necesitados. En la casa familiar de dicha localidad gaditana, él acoge además a parados sin recursos, polizones y especialmente, madres subsaharianas que han cruzado el Estrecho en busca de trabajo. Por esconder inmigrantes ilegales ha sido detenido en varias ocasiones, si bien, el hermano Isidoro siempre habla muy bien de las autoridades policiales y de la Guardia Civil, que incluso, le derivan algunos casos. Entre sus reconocimientos están el ser nombrado Héroe del año de la revista Time en 2003 (único español elegido), Premio UVA de la Cadena SER (1991), medalla de oro de la ciudad de Algeciras, Premio de los sindicatos policiales en reconocimiento a la labor social (1996), Premio Andalusí de honor (2001), Medalla al Mérito de la Guardia Civil con distintivo blanco (2002) y Premio Mundo Negro a la fraternidad (2006).

Además y, por último, el Padre Patera goza de una exquisita sencillez y múltiples valores humanos, hasta tal punto de que hablar con él es una verdadera y auténtica delicia. Me siento muy orgulloso de haber conocido a este gran hombre.

<b>Rafael Ayala Marín</b>

Córdoba