José Antonio Nieto, que esta semana ha repasado su etapa al frente del Ayuntamiento de Córdoba 2011-2015, dice que suele hablar con Julio Anguita, el otro alcalde de mayoría absoluta y da a entender que hubiera necesitado otros cuatro años para cambiar Córdoba, "una ciudad maravillosa y compleja". Nieto, que ha sido el alcalde de las charlas sobre la historia del tiempo presente, la mayoría en el Círculo de la Amistad --"el centro actual de la cultura de Córdoba"-- que más concejales, exconcejales y cargos de su partido congregó para ser escuchado, dijo de ellos que todos están vivos y siguen en plenas facultades. Nieto, natural de Guadalcázar, que ha ganado en número de concejales tres elecciones en Córdoba pero que sólo "gobernó en la peor" aunque de forma colectiva, "no un trabajo mío", "cuatro años en los que el día a día nos ha quitado mucho tiempo". Al hacer historia del Ayuntamiento democrático cordobés José Antonio Nieto habló de "la personalidad de Julio Anguita", que heredó, dijo, de la etapa anterior Emacsa y Aucorsa y que ya en su segundo mandato, el de la mayoría absoluta, comienza un desequilibrio municipal "en el que se relaja el gobierno de Anguita". Al referirse a su etapa, Nieto dijo que heredó un Ayuntamiento a punto de quebrar, en un tiempo de "colapso financiero", pero "lo salvamos", "las nóminas de noviembre no se podían pagar" ya que "la realidad era mucho peor de lo que parecía". El pesimismo de Nieto al narrar cómo encontró el PP el Ayuntamiento de Córdoba en el 2011 se transformó, casi de inmediato, en el hallazgo de la piedra filosofal, que tiene la capacidad de transmutar los metales vulgares en oro, con la organización en la Plaza de Toros de la semifinal de la Copa Davis, que fue elegida por los aficionados como la mejor de todas las celebradas en España, según la Real Federación Española de Tenis, donde venció España a Francia por 4 a 1 y el equipo "logró una comunión especial con la grada". Nieto destacó los 104 países donde se emitió la semifinal de tenis y remitió al ascenso del turismo, francés sobre todo, que vino por Córdoba en los años siguientes. "Con nosotros bajó el paro mucho más que nunca", "nosotros recibimos una herencia negativa bastante peor que la que dejamos": Nieto, evidentemente, alabó sus cuatro años en el Ayuntamiento y señaló que "es un orgullo ser alcalde de esta ciudad" porque "Córdoba merece la pena". Pero también dijo: "Yo tengo un hijo, y como me diga que quiere ser político lo echo de casa", porque "la política es muy esclava e ingrata" y "solo se explica por vocación".