Era la oscuridad lo que asustaba por esos andurriales perdidos de los pueblos, sobre todo si el toque de oración te pillaba alejado de tu casa. Una oscuridad que se acrecentaba por el Día de los Difuntos, cuando se visitaba el cementerio y se hablaba de sus tapias y sepulturas como de lugares terroríficos. Si la noche sin luna sorprendía a alguien en las cercanías del camposanto el terror no se le iba del cuerpo hasta que no estuviese cerca de las primeras luces del pueblo. Oscuridad y abandono han sido conceptos sinónimos, en el mundo rural sobre todo, porque en mitad de las tinieblas, con las que nadie se atreve, los fantasmas de todo tipo podían hacer de las suyas. De críos se iba de noche a pegarle pedradas a las farolas para crear una barrera de oscuridad que impidiese la actuación de los municipales. Y a algunas zonas de los pueblos se las tenía por barrios bajos porque sus calles ni estaban adoquinadas ni apenas tenían un mal farol para alumbrar, espantar sombras y esquivar charcos. Protegidas por la oscuridad las marangas se escondían bajo su sábana para visitar de noche a su amor (im)posible, sin mirar ni el cielo ni el misterio y la belleza de sus estrellas que, en aquellos momentos de caza amorosa, era lo que menos importaba. Luz eléctrica en abundancia para evitar rincones a oscuras y un buen alumbrado ferial se ha relacionado siempre en los pueblos --donde mejor se contemplan las estrellas-- con la prosperidad y el desarrollo. Pero he aquí que desde que la modernidad nos hizo cursis con lo de la gastronomía y en la Junta de Andalucía se crearon partidas que había que gastar en lo que podía rondar el capítulo de lo superfluo las cosas han cambiado tanto que ahora el progreso es, casi, la oscuridad y el problema, la iluminación o contaminación lumínica. La Diputación le ha dado ya a 65 pueblos su estudio correspondiente en esta materia para evitar, por ejemplo, "la intrusión lumínica en la propiedad privada" (una alegría para cacos y ladrones) que "dificulta a la población la observación del cielo nocturno" (?). Volvemos a los candiles y las calabazas con velas de antes de Halloween.