Los hechos ocurrieron en noviembre pasado, y ha pedido públicas disculpas a su principal ofendida, Margarita Robles, objeto de sus insultos por sanchista, pero su actitud no ayuda a Susana Díaz en su candidatura a las primarias socialistas. Mientras Díaz pide compañerismo y respeto en la batalla electoral, el diputado ha sembrado un mal ambiente que deberá reconducir.