Estimado y querido amigo Rafael: las cosas se dicen y se defienden una vez y como mucho se recuerdan por una segunda vez, pero insistir e insistir en ello me parece excesivo. Ya conocemos tu parecer y el de los tuyos sobre nuestra querida Mezquita-Catedral, nuestra y también de los que piensan como tú. Yo escribí mi opinión, reconozco que en un artículo largo y abundante en detalles, pero sólo lo escribí una vez y con esto di mi parecer. Pero hoy escribo no solo para recalcar lo dicho sino para hacerte ver que te estás haciendo muy monótono en tu empeño. Todos sabemos lo que tú, y otros muchos como tú, opinan de lo que hay que hacer con la Mezquita-Catedral. Entre otras cosas entregársela a la Junta de Andalucía y estoy seguro de que no la va a tener tan bien conservada como la tiene el Cabildo catedralicio, porque por experiencia sabemos lo bien atendidos que estamos por Sevilla. Si esta joya de la arquitectura estuviera enclavada en la ciudad hispalense pienso que esto no se estaría tratando. Bueno, pero son elucubraciones. La mismísima Unesco ha visto muy bien su conservación, las reformas religiosas que se le han hecho diciendo que no solo no desmerecen sino que prestigian los distintos estilos arquitectónicos que encierra.

Aseguráis que la Iglesia continuará con el culto católico en la Catedral, pero también se sabe que le daréis a los musulmanes autorización para compartir el culto y que vayan a rezar a ella. Menuda pelotera se liaría en la Mezquita-Catedral con los dos ritos a la vez, ya que muchos coincidirían. ¿Esto es lo que deseáis que ocurra ahora? Verdaderamente simultanear en el mismo edificio, por muy grande que sea, dos ritos tan diferentes, no parece razonable por mucho que se diga.

Fernando III se la entregó a la Iglesia para que la convirtiera en Catedral y con este título se ha sacado adelante durante siglos. Tú dices que se la dio solo para el culto y no en propiedad. ¿De donde sacas tú esta aseveración tan contundente? Mira yo estaría porque fuera del Estado si viera su mala conservación y que no dejaran pasar a verla a todo el mundo por motivos religiosos, pero viendo que esto no existe firmo por su continuación que hasta ahora nos ha ido fenomenalmente. Pero ahora los que no veis con buenos ojos la religión católica habéis inventado estos argumentos.

Poco sé de la Alhambra, pero la intervención de la Junta en ella, según tengo oído, es fatal. El Ayuntamiento quiere que pase a ellos para poner entre otras cosas menos dinero para visitarla y Sevilla no lo permite.

En estos momentos varias naciones están pensando en rechazar sus sistemas de "multiculturalismo". Holanda parece ser que lo va a poner en práctica y es muy factible que Australia, el Reino Unido, Canadá, Bélgica, Francia y USA adopten esta iniciativa para ponerle fin a la proliferación mundial musulmana, la cual no respeta nada ni a nadie

Los católicos hemos transigido en llamarla Mezquita-Catedral porque los argumentos son muy válidos para aceptarlos por el bien de Córdoba.

El artículo firmado por ti que salió el día 15 en este periódico me ha parecido deprimente. Jamás hubiera pensado que era tuyo. Mucho me afecta a mis sentimientos religiosos y al de muchos como yo. Hablas que somos de extrema derecha. Te burlas de uno de nuestros sacramentos. Nos achacas que decimos que queréis poner a los yihadistas, y eso no es cierto y otras cosas.

Quién te dice a ti que los que vienen a visitarla quieren ver sólo el bosque de columnas y no miran la parte cristiana que ella tiene. Si esto lo crees estás muy equivocado. Tú piensas que cuando miran al coro miran para otro lado para no ver tan grandiosa obra de arte. Cuando pasan por el crucero no miran para arriba; cuando entran a la sacristía cierran los ojos para no ver la Custodia de Arfe. Cuando pasan por la Capilla del Sagrario pasan de largo y no miran los frescos de Césare Arbasia de sus paredes o las pinturas de este artista del altar mayor?...

Y esto es todo Rafael. Pensar en profundidad lo que queréis, porque mirándolo bien es un disparate. La Mezquita Catedral como tal lleva teniendo sus cultos más de 750 años, solo se intervino cuatro veces en ella con obras monumentales: una para construir la nueva Capilla Mayor; la segunda para cobijar el alminar en la nueva torre por imperiosa necesidad; otra para hacer la Capilla del Sagrario; y una cuarta para hacer la Capilla Real. Esta última el rey Felipe de Austria quiso destruir la capilla y construir otra y bien se sabe que el Cabildo y el obispo lucharon para negárselo a todo un rey de aquel tiempo, consiguiéndolo. Las cuatro están consideradas como obras artísticas porque los arquitectos se empeñaron en no afear el monumento. Una vez que se hizo esto ya no hay nada que hacer, sólo conservar y vive Dios que hasta ahora lo han conseguido unas veces con dinero del Cabildo y otras con el del Estado.

Aunque no pensamos igual, nuestra vieja y buena amistad perdura y perdurará. Yo, a partir de este escrito, no quiero escribir sobre este asunto más. Un abrazo.

*Ingeniero técnico industrial y escritor