No he podido dormir, sin antes expresar esta sencilla solución, que requiere una pequeña colaboración de un par de agentes de inteligencia especialistas en este tipo de terrorismo urbano, puestos al habla con los concejales de urbanismo de las principales capitales de España. Para que juntos con el plano de la ciudad sobre la mesa, y a pie después, estudien las posibles vías o paseos más transitados por los turistas y los más emblemáticos, que aún no estén cerrados a la libre circulación de vehículos medianos. Con el fin, nada ridículo, de colocar adecuadamente, decorativos macetones solamente o combinados con pivotes, que presenten, estratégicamente dispuestos, un obstáculo insalvable a la libre circulación de vehículos. A la vez que impiden su fácil penetración en el espacio peatonal. Me dirán que recesaríamos miles y miles de ellos..., pues, no. Porque metiéndose en la mente criminal de esos asesinos terroristas islamistas, buscan siempre vías fáciles de acceso que puedan causar más daño a las personas. Las zonas más transitadas o visitas por el turismo y que tendrían la mayor repercusión de ser «atacadas» por un simpe vehículo. Dentro de las ciudades más importantes de España; comenzando por aquellas consideradas de mayor objetivo terrorista. A veces la solución parte de una sencilla, poco costosa, sabia reflexión. Pues no en vano, ya son «ocho casos consumados» que en distintas ciudades de Europa, han masacrados utilizando un simple vehículo como medio «destructor» transitando, sin obstáculo alguno, nada le ha impedido su terrorífica circulación en zigzag. Que como una serpiente venenosa, muerde y mata con suma facilidad a su presa elegida, distraída y paseando.