Corea del Norte comunicó ayer que había probado con «total éxito» una bomba de hidrógeno. El nuevo ensayo nuclear provocó dos terremotos de 6,3 y 4,6 grados, percibidos desde China y Japón. El régimen de Kim Jong-un asegura que puede incorporar la nueva arma a sus misiles intercontinentales, lo que ha vuelto a tensar las relaciones diplomáticas con Estados Unidos.