El color rosa es el símbolo elegido desde hace años para envolver a la sociedad y concienciarla en el Día Mundial del Cáncer de Mama. Las mujeres diagnosticadas de esta dolencia cada merecen acciones especiales, y en esta ocasión el arte del escultor cordobés José Manuel Belmonte ha traído, con toda su crudeza pero con la enorme belleza de la dignidad, la clara expresión de esta enfermedad, la mutilación a la que obliga a tantas afectadas y la lucha de estas por superar miedos y dolor y seguir adelante con su vida. Es la valentía de las mastectomizadas, que miran al futuro con arrojo y esperanza, la que se refleja en la escultura El vuelo de Julia, que muestra sin velos una realidad dura pero cotidiana.
