Juan Antonio Sánchez arrasó e hizo vibrar el Teatro Góngora con su disco Reflejos del agua. Una noche mágica se palpaba en el ambiente, y nunca mejor dicho. El compositor y pianista acariciaba su piano con tal maestría que solo había tiempo para la ensoñación. Desde el principio hasta el final viajamos por un universo mágico, saboreando cada nota, cada palo flamenco perfectamente acompasado dibujando estelas de luz propia.

Déjame que te diga, Juan Antonio, que las palabras sobran ante tanto arte flamenco. El tuyo, ya es un hecho. ¡Qué pedazo de concierto! ¡Enhorabuena maestro! Eres genial y un músico que envuelve al personal entre sus notas perfectamente dibujadas. Con la farruca hemos viajado hasta el infinito, saboreando despacito cada nota y hemos visto cómo tus dedos se mecían intrépidos para ofrecernos ese universo onírico que te honra. Sé que ya has llegado lejos y que te espera un futuro de locura flamenca en Córdoba y en el mundo entero. Las sensaciones que transmites y el rigor en la ejecución de los distintos palos del flamenco nos han hecho soñar despiertos, y luego las caricias justas de tus colaboradores resaltando, aún más, el buen hacer y sentir de los flamencos andaluces. Gracias. El concierto quedará en el corazón de todos los que pudimos disfrutarlo.

<b>Mª Belén García Martín (profesora del IES El Tablero)</b>

Córdoba